Considera que el tiempo para realizar la entrevista debe ser corto.

Establece el medio para realizarla de acuerdo a las posibilidades de comunicación de la persona a entrevistar.

Envía una invitación cordial al entrevistado, explicando el propósito y la importancia que tiene su presencia.

Genera un ambiente de confianza y cálido: da importancia a su presencia, pregunta cómo está y cómo se siente. 

Expresa la importancia que tiene la entrevista para ti.

Utiliza un lenguaje claro y sencillo; en caso de ser necesario, explica a qué te refieres con algún término, pon algún ejemplo si es necesario.

Muestra una actitud amable y empática durante la entrevista; si es posible, establece contacto visual.

Profundiza en los aspectos relevantes que vayan surgiendo, principalmente los relacionados con el proceso educativo de sus hijos, como el vínculo escuela-familia.

Puntualiza las situaciones positivas que tienen los hijos del entrevistado.

Promueve expectativas positivas; es decir, las cosas que sus hijos pueden lograr.

Propicia que la familia proponga acciones para mejorar las situaciones que se requieran.

Proporciona orientación en las situaciones que la requieran.

No impongas juicios de valor, sé parcial ante la información que se proporcione.

Establece acuerdos para realizar en la escuela y en la casa, transmite la idea de trabajo en equipo entre la escuela y la familia.

Establece una comunicación abierta y de confianza para que la familia pueda acercarse y expresar sus inquietudes, dudas o sugerencias.

Registra los acuerdos.

Da seguimiento a las acciones que se establecieron en la escuela y en la casa.

Programa una reunión posterior para valorar, en conjunto con la familia, los avances, los aspectos a fortalecer y establece nuevos acuerdos.