Cuidarte y cuidar a los otros

¿Alguna vez te has preguntado qué es para ti el cuidado?

Este contenido te invita a reflexionar sobre el cuidado, que implica una serie de prácticas mediante las cuales se establece una relación  de bienestar contigo mismo y con los demás.

Mensaje Clave

El cuidarte a ti mismo no se limita a procurar tu bienestar físico, sino también incluye cuidar tus pensamientos, comportamientos, emociones, hábitos, actitudes, creencias, valores, necesidades (biológicas, psicológicas y sociales), bienes y todo aquello que te genera bienestar. Ello implica poner atención a tu ser integral: tu físico, tu mundo emocional, tu espíritu y tu entorno.

Para lograr cuidarte, es importante desarrollar un mayor conocimiento de ti mismo, tener conciencia sobre qué es lo que quieres y necesitas, y tener la templanza para tomar acciones positivas que te lleven a alcanzar tu bienestar.

El amor a ti mismo representa una cualidad imprescindible para el cuidado, ya que el aumento de tu autoestima y el concepto positivo sobre ti mismo permitirán desarrollar actitudes y comportamientos favorables a tu ser; te permitirán mirarte con ternura, calidez y comprensión, así como potenciar la autorreflexión y la sabiduría sobre ti mismo. Solo desarrollando esta habilidad del amor hacia ti mismo, te será posible cultivar el aprecio y el cuidado a otros.

La empatía, el respeto, la escucha, la comunicación y la disposición de ver por el otro, son habilidades imprescindibles en el cuidado a los demás. El cuidado del otro requiere estar presente, con todos los sentidos, y comunicarse con la persona o las personas que reciben el cuidado. En este proceso resulta importante no solo escuchar atentamente y con respeto, sino también dirigir tu atención y respuesta a las necesidades del otro.

¿Por qué es importante?

Cuidar de ti mismo y cuidar a otros, representa un proceso de aprendizaje que implica el desarrollo de la integralidad del ser: mente, espíritu, cuerpo. Involucra también un proceso de autoconocimiento, toma de decisiones, responsabilidad y autoestima, así como respeto y aprecio por los demás.

Cuidar de ti mismo y de los otros implica desarrollar un mayor conocimiento de ti mismo, y poner en práctica con ello actitudes favorables fundamentadas en el amor, la armonía, la felicidad, así como el sentirte bien contigo mismo y con los demás.

Para saber más
  • Foucault, M. (1999). “La ética del cuidado de sí como práctica de la libertad”. Estética, ética y hermenéutica. Barcelona, España: Paidós.
  • Gilligan, C. (1982). “In a Different Voice: Psychological Theory and Women’s Development”. Cambridge: Harvard University Press.
  • Goleman, D. (1999). La inteligencia emocional. Buenos Aires, Argentina: Javier Vergara Editor.
  • Heidegger, M. (1991). El ser y el tiempo. México: Fondo de Cultura Económica.
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